Su fichaje sigue a la espera de que el jeque y presidente del PSG encuentre su sustituto
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El PSG sigue sin entrenador. Eso es un problema para Nasser al Khelaifi, el jeque y presidente del club, pero también lo es para el Real Madrid. A día de hoy, el club blanco sigue buscando la fórmula para cerrar el acuerdo con Carlo Ancelotti.
Como ya anunciaba MARCA, la idea era que esta semana todo quedara arreglado para poder presentar al entrenador la próxima semana. El PSG parece incluso dispuesto a aceptar los 4 millones de euros el italiano, pero siempre cuando tengan un sustituto y ahora mismo no hay un candidato a la vista.
Y es que si para el Madrid la situación empieza a ser incómoda, -sin entrenador y con Zidane como líder del proyecto, aunque aún ni se le ha visto- también lo es para el PSG, que sabe que Ancelotti es ahora entrenador porque lo dice el contrato ya que no quiere seguir en París y así se lo ha repetido varias veces a sus dirigentes.
Pero el PSG sigue a lo suyo, buscando entrenador. Primero se cayó Mourinho, que se marchó al Chelsea. Después Benítez y ahora suena Capello, pero el italiano dirige a la selección rusa y su idea es acabar al menos su obra con el próximo Mundial. Blanc no convence y Leonardo como interino es casi imposible por su sanción.
Técnico puente
La sospechas en Francia apuntan hacia Wenger, pero no para esta temporada, sino para la próxima. Eso podría estar complicando la contratación del técnico porque no todos quieren asumir ese papel de entrenador puente. Al Khelaifi sabe que el partido va a ser largo, aunque ya disfrutó ayer con las cinco horas de Nadal y Djokovic. El jeque no parecía muy preocupado en la pista central de Roland Garros, donde no perdió detalle del triunfo del manacorí, con quien mantiene una buena relación.
La sospechas en Francia apuntan hacia Wenger, pero no para esta temporada, sino para la próxima. Eso podría estar complicando la contratación del técnico porque no todos quieren asumir ese papel de entrenador puente. Al Khelaifi sabe que el partido va a ser largo, aunque ya disfrutó ayer con las cinco horas de Nadal y Djokovic. El jeque no parecía muy preocupado en la pista central de Roland Garros, donde no perdió detalle del triunfo del manacorí, con quien mantiene una buena relación.
Mientras tanto, en la Casa Blanca han visto que sus primeros intentos por traer a Carlo han fracasado. Y eso que Ancelotti está dispuesto a poner de su parte y pagar dos de los 4 millones que cuesta su libertad y su ansiado billete a Madrid.
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