La nueva baja de Bale y la reunión del vestuario marca el debut en Europa en el Bernabéu ante el Copenhague
Infografía: MARC CREUS / FABIÁN CABRERA
| 2.10.2013 | 04:05h.
El debate de Casillas ha pasado a mejor vida. Ya no hay alarma de que el capitán blanco recobre la titularidad en el Bernabéu ocho meses después. Tampoco si Ancelotti sentará a Benzema y pondrá al aclamado Morata, aunque interesa más que Casillas. Pero sí que Bale vuelva a ser baja por una recaída en el mismo músculo que le impidió debutar ante su público hace una semana, o la reunión en del vestuario para analizar la crisis. Algo que empieza a ser norma habitual en los últimos tiempos. A diferencia de la etapa anterior, en el primer cónclave se admitió, e incluso se forzó, la presencia de Carlo Ancelotti, que estuvo acompañado por Zidane, aspirante de futuro al banquillo blanco. Análisis de la situación y mensaje al técnico: “Confiamos en usted. La culpa es nuestra”.
Una afirmación que deberá filtrar una afición enfadada con su equipo en el partido de esta noche ante el Copenhague, en el debut en casa de esta Liga de Campeones y sin Bale. Un rival que debe servir de bálsamo para enterrar el dolor que sembró el Atlético en las almas de los seguidores blancos. Y decimos debe porque la 'calentura' del aficionado ha roto el termómetro de lo permisivo y cualquier duda que vea en los suyos será motivo de más jaleo en torno a un entrenador que asume sus errores, los explica, justifica y promete que serán solucionados. Pero Ancelotti también rindió cuentas a Florentino y José Ángel Sánchez. ‘Filtró’ lo sucedido en la reunión matinal del vestuario. Lo peor es que el presidente y su mano derecha le ofrecieron su apoyo y ya se sabe lo que ocurre en estos casos. Se dice que a entrenador confirmado, entrenador cesado...
No parece probable que el Copenhague asuste mucho al Madrid a pesar que sus antecedentes obliguen a mirarle de reojo en un cruce europeo inédito. Empató hace 15 días en Turín ante la Juventus 1-1 con el meta Wiland como héroe; si vamos más atrás, dejó su firma heroica al empatar ante el Barcelona en Copenhague en el 2011 (1-1) y cerrar aquella fase de grupos como segundo colándose en los octavos de final. Pero el campeón danés llega a la cita peor que el subcampeón español: penúltimo de su Liga, en puestos de descenso, y sumido en una tormenta tras perder también su derby ante el Brondby, que moja tanto como de la que se tapan los madrileños. Un Copenhague que tampoco acaba de recuperar el sentido al juego que intenta transmitir su entrenador Solbakken, que se hizo cargo del equipo en su segunda etapa, en la quinta jornada de Liga con dos puntos y penúltimo en la tabla. Cinco jornadas después ha sumado ocho puntos más pero sigue en el mismo puesto de descenso.
Ancelotti no adelantó su once, pero la baja de última hora de Bale trastoca algo sus planes aunque tiene a Di María para suplirle y así el 'Flaco' se libra del banquillo. Los que pueden pagar los platos rotos del derby son Pepe, Arbeloa, Illarra y quizá Benzema y Coentrao. Varane, Carvajal y Modric apuntan al once y quizá Morata y Marcelo si el italiano se atreve.
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